Mentor UDD Ventures, con vasta trayectoria en empresas familiares, grandes corporaciones, destaca hoy su compromiso con la gestión del cambio, las buenas conversaciones y el involucrarse con las startups a las que acompaña.
Con una extensa trayectoria en empresas familiares, ingeniero de profesión, Roberto Hernández, mentor UDD Ventures recuerda como en el año 97 llegó a formar parte de The Coca-Cola Company, empresa en la que estuvo por más de 16 años en lo operacional y corporativo. Esta experiencia y las anteriores, en su rol de líder de equipos, le permitió percibir la importancia de las creencias limitantes en los procesos de gestión de cambio dentro de las organizaciones.
“Cuando tú ves a equipos y personas dar ese salto de creer realmente en lo que están haciendo, los procesos de implementación y gestión de cambio se volvían extraordinarios, mientras que cuando había dudas o resistencia, no resultaban, había mucho stress en la organización” afirma Hernández sobre lo que fue el punto de inflexión que lo llevó a iniciar su práctica como mentor y coach.
“En mi práctica gerencial comencé a asistir a talleres de coaching, conocer a mentores, reunirme con viejos sabios, porque quería explorar qué era lo que detenía a las personas. Los resultados que tuve fueron extraordinarios al punto que decidí renunciar a Coca Cola, formarme como coach y mentor y pegarme este salto grande para ayudar a que equipos y personas crean en sí mismos”, explica.
Con la decisión tomada, Roberto comenzó a generar los espacios que lo vincularan con emprendedores, fue invitado por programas como Jump Chile de la Universidad Católica, y salió a buscar nuevos horizontes que le permitieran impulsar a las personas a “creerse el cuento de emprender”.
“Tuve la fortuna de empezar este camino desde 2014, apoyando a startup de base tecnológica, aún no tengo ningún unicornio”, declara entre risas, agregando que “ser mentor me ha permitido tener una visión amplia de la sociedad, conectar con personas -generalmente- más jóvenes que yo, vincularme con sectores de la industria muy amplios”.
A lo que agrega, “y en ese salir a buscar oportunidades, recuerdo que llegué tocando la puerta a UDD Ventures porque admiro el estilo en cómo se preocupan, asisten, acompañan a sus mentores, hay un interés por mantenerlos, no es sólo una relación transaccional”.
“Una buena conversación a la vez”
Formado como mentor certificado por Human Coaching Network y con un diplomado de innovación y emprendimiento de la U. Adolfo Ibañez, Roberto relata que en el día a día lo que lo mueve es generar los espacios para una buena conversación.
“Como dice Maturana, la realidad se crea a partir de conversaciones. Por eso, siento que mi misión es cambiar el mundo con una buena conversación a la vez, y la forma de lograrlo es realizando mentorías, haciendo talleres, coaching. Porque mis objetivos son tres: primero, inspirar al emprendedor a tomar acción respecto de lo que quiere lograr; segundo, generar las transformaciones personales necesarias para que el negocio que lidera también se transforme; y tercero, que esa transformación genere un impacto positivo en su vida, y en bienestar de su círculo cercano”, enfatiza.
¿Cuál es el compromiso tras una buena conversación?
- Todas las conversaciones son extraordinarias, porque te obligan involucrarte con el otro. Como mentor debo entender el negocio de la persona que viene a trabajar conmigo. Conocer sus procesos, adquirir el producto si este es físico, ir al retail a conocer la competencia, seguir sus redes sociales, ser mentor no es solo transmitir un conocimiento, sino que me meto de lleno a su mundo y eso es muy enriquecedor. Hago un mapa completo del emprendimiento al que voy a mentorear.
¿Qué les recomendarías a mentores y emprendedores en esta etapa de tu carrera?
- Les recomendaría estar en constante contacto con la realidad, ir al lugar donde ocurren las cosas, explorar el entorno en el que vivimos, ir a la playa, andar descalzo, recorrer la ciudad. Empaparnos de realidad.
¿Nos recomiendas un libro para derribar limitaciones?
- Sí, estoy releyendo ahora “Rompiendo el hábito de ser tu mismo” de Joe Dispenza.