La industria del retail ha estado trabajando en estos meses en desarrollar soluciones para cuando el desconfinamiento sea una realidad en la mayoría de los países y ciudades, sabiendo que la confianza de los compradores será probablemente lo último en restablecerse.
Medios especializados en registrar tendencias, como Trend One, ya están publicando notas con casos concretos de este desarrollo, en algunos casos nuevo y en otros acelerado por la pandemia. Estos tres se relacionan con las compras en un minimarket de Alemania, la atención en un fast food de Moscú y probarse la ropa de manera virtual en California.
Minimarket automatizado
La empresa emergente Smark, con sede en Stuttgart, ha desarrollado tiendas de conveniencia automatizadas, conocidas como Smarkboxes, que pueden estar abiertas al público durante todo el día.
Los clientes usan una aplicación móvil, o una pantalla táctil, para seleccionar productos, y un sistema automatizado de almacenamiento y recolección recoge y emite los artículos en minutos.
El software garantiza que el inventario que caduque pronto se distribuya primero para reducir el desperdicio. El minimarket automatizado ya permite compras sin contacto en la pandemia de Covid-19.
Robot y cinta transportadora
La cadena de comida rápida KFC ha abierto una sucursal en Moscú en la que ofrece a los clientes un servicio totalmente automatizado. Este ‘Restaurante del Futuro’ tiene como objetivo minimizar el contacto entre el personal y los clientes, y prevenir infecciones.
Los consumidores solicitan su comida en terminales digitales y pueden pagar mediante reconocimiento facial. Una vez que la comida ha sido preparada, se envía en una cinta transportadora a un robot que levanta la bandeja y la coloca en un compartimento cerrado. Los clientes ingresan su PIN para poder retirar su comida.
Probador virtual
La empresa californiana Bold Metrics desarrolló una solución digital llamada ‘Contactless Fit’, que permite a los clientes probarse la ropa sin tener que ir un probador. Esto está dirigido a los comerciantes obligados a implementar medidas de protección durante la cuarentena por Coronavirus.
Contactless Fit está instalado en una tablet o teléfono inteligente del comprador. Luego de que este responde de cuatro a seis preguntas, los algoritmos de aprendizaje automático determinan su tamaño correcto. Las personas pueden también probarse virtualmente diferentes ropas de diferentes tamaños en su propio cuerpo.