Cerca de 123 mil toneladas de aceites lubricantes se ponen cada año en el mercado, de las cuales apenas 60 mil son tratadas y el resto se dirige a un destino incierto, con el riesgo que eso trae aparejado. Por eso, la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (más conocida como Ley REP) se hace cargo de este producto prioritario, obligando a los productores de aceites lubricantes a gestionar sus residuos. El decreto de metas asociado a la ley ya fue sometido a consulta pública y se espera que en los próximos meses debiera ver la luz.

Uno de los puntos más importantes de dicho decreto es que, al primer año de vigencia de la ley, las empresas productoras deberán recuperar y valorizar el 50 por ciento de los aceites lubricantes distribuidos en el mercado, y dicha meta irá escalando gradualmente hasta llegar a un 90 por ciento en un plazo de diez años.

De ahí que la startup Sicalu -nacida en 2021- se haya anticipado al período en que la Ley REP entre en vigor y sea aplicable para los productores de aceites. En tal sentido, Sicalu ofrece una plataforma de monitoreo en tiempo real, de forma remota y georreferenciada acerca de los aceites lubricantes contenidos en tambores y estanques, con lo cual ayudará a dichos productores a cumplir las metas establecidas por la normativa de una forma eficiente y controlada.

“Nuestra solución es un sistema. No funciona uno sin el otro. Consiste en un dispositivo que se pone en la boca o apertura de los tanques o contenedores de 208 y 1000 litros, y ese dispositivo mide la altura al interior de los contenedores. Se puede saber la cantidad de litros que hay en el interior, y el volumen de llenado y vaciado. Sirve para la recolección y reposición efectiva e inteligente”, comenta la ingeniera física Natalia Gajardo, cofundadora de Sicalu. Los otros dos miembros son el también ingeniero físico Cristian Ayala y el ingeniero civil industrial Jonathan Oyarzo.

Este dispositivo, además, es resistente a la intemperie y es capaz de medir con altos niveles de precisión los líquidos. Y, en el marco de la Ley REP, les permite a los productores y comercializadores de aceites lubricantes tomar decisiones acerca de dónde, cuándo y cuánto aceite reponer en cada uno de sus clientes.

“Más que ir a recolectar nosotros el aceite, el problema que hay es que no saben cuándo ni dónde tienen que ir a recolectar. En un taller dicen que hay dos tambores y en realidad tienen uno lleno y un poco del otro. La recolección eficiente tiene que hacerse con información. Con este sistema se puede tener la trazabilidad completa del producto o, para el caso de la Ley REP, del residuo. Es importante la eficiencia también para saber qué ruta trazar de manera estratégica y eficiente”, agrega Gajardo.

Y complementa: “Efectivamente hay que hacerse cargo del residuo, porque existen plantas de tratamiento, pero lo que se recolecta no llega al 40 por ciento. El 60 por ciento queda en la basura o se derrama. La idea nuestra es ir a buscar lo que no se recolecta”.